Solo quiero añadir que aunque en Argentina hasta a un pibe (niño) se le pueda decir pendejito sin problema, en México es la palabra pendejo es muy ofensiva, pues no se debe mencionar en frente de niños ni damas.
Usualmente denota un profundo desagrado por la persona a la que se le llama pendejo, y comunica implícita (pero claramente) que se está dispuesto a llegar a la violencia o los golpes por tal desagrado.
¡Saludos hermanos hispano-hablantes!