EL PRIMER PRESIDENTE DE MÉXICO.
Vicente Guerrero asume la presidencia de la República.
Abril 1 de 1829
Recibe el poder ejecutivo de manos de Guadalupe Victoria, primer Presidente de México. Lo ha nombrado el Congreso tras anular unas elecciones en las que había resultado vencedor Manuel Gómez Pedraza y perdedor Vicente Guerrero. Pero cuyo resultado había sido impugnado con el argumento de que las votaciones habían sido hechas en los estados donde predominaban los conservadores. De esta impugnación había surgido el levantamiento armado llamado el motín de la Acordada, y Gómez Pedraza había renunciado al cargo y salido del país.
Guerrero trata de encargar a personas aptas el despacho de los asuntos de estado e integra su gabinete con: José María Bocanegra, secretario de Relaciones Interiores y Exteriores; Francisco Moctezuma, de Guerra y Marina; José Manuel de Herrera, de Justicia y Negocios Eclesiásticos y –buscando contemporizar intereses- nombra a Lorenzo de Zavala, de Hacienda; él mismo en su Ensayo Histórico confesará que su absoluta inexperiencia en éste ámbito le “hizo engolfarse en los mismo desastrosos contratos que con grande ardor había reprobado en sus antecesores”. Con estos nombramientos la posición de las logias se divide aun más cuando Anastasio Bustamante es nombrado vicepresidente; él por su extracción, carácter y educación, no puede ser amigo de los insurgentes ni de Guerrero.
Aparentemente el ascenso al poder de Guerrero se debe al apoyo popular, sin embargo, muy pronto la sociedad estará inquieta pues personas sin mérito aspirarán a obtener puestos ventajosos; la “gente decente” despreciará su ascendencia mulata, sus malos modales y su falta de educación; el clero –que había reducido los dogmas a prácticas vanas y fanáticas- sólo tratará de mantener sus posiciones y el ejército, acostumbrado a pelear y a ver con desprecio al grupo en el poder al que ha combatido, no sabrá ahora qué postura adoptar.
La opinión pública clamará por la...