¡Bienvenidos al fascinante mundo de la escritura japonesa! El ámbito de la cultura popular y todo lo que rodea al país del sol naciente es tan único y especial que la escritura japonesa no podía quedarse atrás. En este caso en particular, la singularidad es que no solo existen uno o dos, sino tres sistemas para escribir en japonés.
A pesar de estar considerada como una de las lenguas más desafiantes a la hora de aprender, millones de estudiantes procedentes de todos los rincones del planeta aceptan el reto cada año y se inscriben en algún curso de japonés. Y, evidentemente, uno de los primeros escollos que se encuentran son los diferentes tipos de alfabeto japonés.
Entonces, ¿cuáles son los tres sistemas para escribir en japonés?
La escritura japonesa consta de tres sistemas para escribir que son: el kanji, el hiragana y el katakana. Para lograr dominar el idioma es necesario conocer estos tres alfabetos japoneses, ya que se usan conjuntamente y en ocasiones pueden encontrarse en una misma frase. El kanji está formado por caracteres de origen chino, mientras que el hiragana y el katakana son silabarios autóctonos.
Para los estudiantes de japonés como lengua extranjera, resulta muy interesante y aconsejable conocer la procedencia e historia de cada sistema de escritura para darse cuenta de la evolución del idioma japonés a lo largo de los siglos, y para tener una base más sólida que les permita identificar sus características distintivas durante el proceso de aprendizaje.
Kanji
Un gran número de alumnos, tanto extranjeros como nativos, coinciden en que el kanji es posiblemente la parte más complicada del idioma japonés, principalmente porque su conocimiento requiere mucho esfuerzo, práctica y capacidad de memorización. El kanji fue el primer sistema de escritura utilizado en Japón y se introdujo en el archipiélago desde la península de Corea alrededor del siglo IV d. C., cuando el país nipón ya tenía su propia lengua hablada pero no un sistema de escritura que la acompañara.
Estos sinogramas se usan en su mayoría para expresar palabras o conceptos y a cada uno le corresponde un significado. Los niños japoneses aprenden aproximadamente 1.000 kanjis durante los seis años de primaria, lo que les permite comprender el 95% de todos los textos. Por otro lado, el gobierno japonés asegura que existen 2.136 kanjis esenciales, aunque se estima que los profesores de literatura japonesa pueden llegar a conocer hasta 10.000 kanjis.
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Reserva una clase de pruebaHiragana
El hiragana es uno de los dos silabarios o alfabetos fonéticos empleados en la escritura japonesa, junto al katakana. Es el primero que aprenden los niños japoneses y su escritura está caracterizada por trazos curvos y simples. Además, es la base de la mayoría de las palabras comunes y de la gramática. Fue creado en el siglo VIII d. C. por mujeres de la aristocracia japonesa como una alternativa más sencilla a los kanjis, ya que se fundamenta en los sonidos y no en las imágenes de palabras.
Consta de 46 caracteres en total, de los cuales 40 representan sílabas formadas por una consonante y una vocal, 5 son vocales (a, i, u, e, o); y la única consonante que puede ir sola, la ‘n’ (ん en hiragana). El hiragana se combina con los kanjis como parte de la gramática japonesa y los estudiantes van reemplazando los caracteres silábicos en favor de los caracteres chinos a medida que aprenden estos últimos.
Katakana
El tercer sistema para escribir en japonés es el katakana. Al igual que el hiragana, es un silabario o alfabeto fonético, y fue creado en el siglo VIII d. C. por unos monjes budistas japoneses para que sirviera como una versión simplificada del kanji. Aunque el katakana comenzó como compañero del kanji chino, hoy en día se utiliza para escribir fonéticamente palabras de origen extranjero, especialmente nombres de lugares y personas. También se usa para escribir onomatopeyas y para enfatizar palabras.
El conjunto de los 46 caracteres katakana abarca los mismos sonidos que el hiragana y algunos incluso se parecen un poco. Estos representan sílabas compuestas por una consonante y una vocal, o bien una sola vocal. De las consonantes, únicamente la ‘n’ puede ir sola.
Otras curiosidades de la escritura japonesa
Si bien es cierto que aprender japonés puede resultar un reto mayúsculo para los estudiantes hispanoparlantes, existen algunas peculiaridades que ayudan a que no sea tan complicado. En japonés no se distingue la forma singular o plural, ni el género femenino o masculino. Esto puede ser un inconveniente para los alumnos japoneses que quieren estudiar español, pero en el caso contrario es claramente una ventaja.Asimismo, en la lengua japonesa pueden crearse frases utilizando solo los verbos. Las frases en castellano suelen seguir un orden de palabras sujeto-verbo-objeto (SVO), mientras que en japonés se utiliza el orden sujeto-objeto-verbo (SOV). Sin embargo, no es necesario especificar el sujeto (y los objetos son opcionales, al igual que en español), por lo que es posible formar una frase empleando solo verbos. De hecho, se puede mantener toda una conversación sin mencionar nunca el sujeto.
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Reserva una clase de prueba¿Cómo aprender los tres sistemas para escribir en japonés?
Los alumnos que tengan como objetivo dominar la escritura japonesa con fluidez deben saber que tanto el hiragana como el katakana pueden aprenderse en varios meses de estudio intensivo. Por el contrario, debido a la gran cantidad de caracteres que integran el kanji, este sistema para escribir japonés puede llevar uno o más años de aprendizaje.
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